Información y características del ave hornero
Te contamos sus características.
El hornero es un pequeño y bello pájaro que no llega a pesar más de 60 gramos y posee una escasa capacidad de vuelo. Sus ojos, sus patas y sus plumas son de color pardo terroso (marrón) al igual que el nido que construye. En el presente artículo de mascota doméstica veremos algunas de las características que más sobresalen en el ave hornero.
Acerca de su hábitat
Montes, pastizales y parques son los lugares más comunes en donde podemos encontrar al hornero. Para vivir, el hornero necesita abundante vegetación y en ese sentido resulta importante que su hábitat contenga diversos árboles y plantas. El agua, resulta también importante y será muy difícil encontrar este tipo de aves en donde escasee el presente recurso.
En definitiva, es en medio de una enorme vegetación en donde el hornero puede construir su nido y al mismo tiempo, es en lugares húmedos donde tiene la oportunidad de alimentarse.
Estos recursos indispensables para la vida del hornero deben encontrarse en demasía al interior de su hábitat, ya que el ser ésta un ave sedentaria que no migra, no puede moverse hacia otro sitio a buscar lo necesario para vivir.
El hornero, ave que vive en pareja
Es muy difícil diferenciar a simple vista un ave macho de la hembra, ya que visualmente resultan pájaros muy similares. De todas formas, siempre que veamos dos horneros juntos podremos asegurar que son pareja, ya que este tipo de aves decide así pasar sus días.
Las uniones de los horneros en pareja suelen durar toda la vida, y en esa relación hay una forma de establecer roles que resulta enormemente llamativa. Juntos arman el nido, juntos cuidan los huevos, juntos crían sus pichones. El ave hornero es en ese sentido un ejemplo de compañerismo que llama poderosamente la atención.
El nido del hornero
El nombre mismo del hornero se refiere a su nido y la forma en que se construye. Lo cierto es que el nido del hornero resulta una verdadera creación y cobra mayor relevancia si tenemos en cuenta que está construido íntegramente por aves.
En momentos de nidificación la saliva del hornero se hipertrofia y genera la humedad necesaria para una buena construcción. La secreción de humedad propia de la saliva del hornero, ayuda a humedecer el material y de esa manera lo torna moldeable. Lo más llamativo de todo es el tiempo en que un hornero puede construir su casa, y el mismo nunca supera los 8 días de trabajo.
Por último, vale remarcar aquí de qué material construye su nido el hornero para entender cuál es la optimización de recursos que esta ave lleva adelante para la creación de su propio hogar. El barro es sin duda la materia prima por excelencia sobre la cual el hornero erige su hogar, y a él se agregan restos de pasto, ramitas, semillas, crines de caballo, paja y restos de hojas.
Así, con ese material y ese labrado, el hornero construirá su nido y junto a su pareja criará allí mismo a los pichones.
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