
Maltrato animal el caso de las gallinas maltratados
Hay una realidad circundante a la alimentación de los seres humanos y es que muchas de las especies que se consumen atraviesan antes de llegar a nuestra mesa situaciones de maltrato. La importancia de tratar esta problemática radica en la necesidad de entender cuál es la relación que de nuestra parte establecemos con los demás seres vivos y por qué en definitiva este tipo de prácticas vienen a discutir la propia noción de mascota. En esta oportunidad hablaremos del pollo y compartiremos información relativa a los maltratos sufridos por la presente ave al momento de su cría industrial.
Se dice que la gallina es el ave más presente en nuestro planeta tierra y algunas cifras indican que existen más de 13.000 millones de ejemplares. A los oídos de cualquiera esto puede resultar una buena noticia, no así para muchas de estas aves que al quedar atrapadas bajo una industria de producción masiva de alimentos, se ven sometidos a los más desconsiderados maltratos.
Cuando los pollos de cría son pequeños, sus picos sensibles son mutilados cruelmente por medio de la utilización de navajas a altas temperaturas. La idea de este primitivo procedimiento es evitar peleas entre los animales por medio de su pico que desemboquen en una merma de la calidad del producto acabado. Ni siquiera podemos decir que este tipo de peleas entre gallinas son naturales, más bien son consecuencia de una forma de maltrato previa (el encierro al que son sometidos) que les genera una gran frustración.
Otra cuestión ampliamente difundida en los criaderos de pollos y que también da cuenta de mutilaciones a los que este tipo de aves son sometidos, es el hecho de que por el mismo motivo mencionado anteriormente, también se cortan dedos y crestas. Este tipo de amputaciones, jamás se realizan bajo anestesia y en ocasiones provocan la propia muerte del animal. Encierro y mutilaciones parecen ser dos cuestiones relevantes en relación a esta problemática y desgraciadamente, naturalizadas en el proceso productivo.
Vale acotar aquí que la problemática mencionada es sumamente diversa y abarca otras ramas del sistema productivo destinado a la alimentación de los seres humanos. Muchos son los animales que sufren maltrato al momento de ser criados bajo la lógica de producción capitalista y a la realidad de las gallinas podríamos anexar sin temor a equivocarnos el maltrato que sufren los animales de granja o aquel que concierne a los peces de las piscifactorías. Desde luego, esta es una problemática urgente para nuestra sociedad en general y, en particular, para todos los amantes de las mascotas.
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